En el marco de un paro de 24 horas, los médicos realizan una nueva jornada de protesta, con el apoyo de distintos sectores, a partir de las 16:30.

La lucha de los trabajadores del Hospital Garrahan continúa y este jueves se movilizan al Congreso en reclamo de mejoras salariales y contra al desfinanciamiento que lleva adelante el Gobierno. En solidaridad, esta mañana los metrodelegados de la línea B abrieron los molinetes de la estación Federico Lacroze por una hora.
Desde la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro (AGTSyP) expresaron en redes sociales que «este jueves marchamos junto a la Confederación de Trabajadores del Transporte, la CTA de los Trabajadores, la CTA Autónoma, la UTEP y todxs los argentinxs en defensa del Garrahan y la Salud Pública contra el ajuste del gobierno de Milei».
Este es uno de los sectores que se suman a la lucha de los trabajadores del hospital, quienes reclaman en contra de las modificaciones al sistema de residencias, la pérdida de personal médico y exigen mejoras salariales.
Un informe de la Fundación Soberanía Sanitaria advirtió que la pérdida de poder adquisitivo en términos reales se estima en 54%, sin contar que rubros como medicamentos o insumos presentan una inflación por encima del índice general.
Desde el hospital, el periodista Alejandro Moreyra habló con médicos y médicas sobre la crisis que atraviesa uno de los hospitales más importantes de la Argentina. «Necesitamos el apoyo de toda la sociedad, que toquen al Garrahan es muy grave. El desfinaciamiento que tenemos, la precarización de las residencias, la perdida de becas, nosotros formamos gentes para todas las provincias», sentenció Jorge Rossi, jefe de clínica de laboratorio.
En esa línea, la jefa de cínica de oncología, Miriam Guiter, expresó que el paro que llevan adelante se debe al conflicto que se viene agravando desde hace un año y medio. Sumado a esto, rechazan la implementación de un nuevo sistema de residencias «que funcionaba perfectamente y es la base de todos los profesionales futuros».
«Se pasa a un sistema de becas, se precariza totalmente, a los profesionales que ya se fueron se van a sumar profesionales que no van a querer venir por la precarización laboral y un hospital que funciona se está deteriorando a los ojos del pueblo argentino», cerró.